Mi libreria: Taj Mahal

Después de haber leido a Redivivo, no puedo evitar seguirle la corriente y habalr de cual es MI liberia, aunque ultimamente la tengo bastante abandonada, la verdad. El tema que nos propone Redivivo es que, al igual que cada uno tiene SU panadería, SU bar de la esquina, SU sitio en la mesa, SU rincon del sofa,... también tiene SU tienda de comics. A la que va desde siempre, donde te conocen desde crio y saben de tu vida.

En mi caso, esto se remonta a unos catorce años atrás. Yo, por entonces era una mierda crio que dependía de su hermano mayor para comprar determinados comics. Sabia de la existencia de una "Tienda de los tebeos" donde solo se vendian... eso... tebeos... de hecho, llegué a dudar de su existencia, hasta que un día me decidí a acompañarle, y aunque yo me había montado una idea completamente distinta, aquel cuchitril de menos de veinte metros cuadrados tenía la capacidad de saciar todas mis necesidades de tebeos por mucho tiempo. Allí es donde comencé a coleccionar comics, viendo las portadas de titulos que me eran completamente desconocidos, comprando comics de los que luego me he arrependitod enormemente,... allí colgué un cartel para reclutar gente para un fanzine, y tiempo más tarde fue el primer sitio donde me dejaron venderlos.

Ese ha sido lugar de reunion para muchos de los frikis zaragozanos, y cuando la idea de hacer unas jornadas del manga en Zaragoza era tan solo un germen, contamos con la participación economica de ellos (tambien de Saga, no lo vayamos a negar). Allí es donde me han cambiado un tebeo que había comprado mi hermano el dia de antes sin yo saberlo, y donde nunca me han puesto pegas por nada. Hace unos años, cuando cambiaron a un local mayor (a tan solo unos metros del anterior) fue donde vi como un cura bendecía la buena marcha del negocio, y echaba agua bendita al personal y a los comics. Allí es donde me di cuenta, que Julia, mi señora era lectora de comics, y sabía quienes eran Magneto y Picara (de hecho, conocía temas de los X-Men mucho mejor que yo, más aficionado al manga), lo que siempre he dicho que era "la guinda" para que terminara de gustarme.

Allí es, en definitiva, donde están siempre Pepe, Mari, Enrique... y donde en ocasiones paso el rato hablando de tonterias de la vida. Hay más librerías en Zaragoza, pero esta es MI librería. Y si tu tienes la tuya, te animo a que nos lo cuentes.