Jornaicas de Zaragoza 2005

Este año -como todos los anteriores- he ido a las Jornaicas para ver lo que se cuece en el mundillo del manganime maño. Tengo que aclarar, no me gustan los karaokes, ni los musicales, y no suelo comprar figuritas o merchandising parecido. Tan solo leo manga y veo algunos animes, y llevo muchos años haciéndolo, a pesar de lo cual, he seguido acudiendo a la cita del último fin de semana de septiembre.

Siguen haciéndose en el Centro Cultural Delicias de Zaragoza, situado en la Avenida Navarra, junto a la flamante nueva estación de trenes, pero poco ha cambiado desde su dos últimas ediciones, salvo una cierta especialización dentro de la obra musical (según me han comentado, ya os digo que no me gustan, ni voy a verlas), y un aumento en el número de stands de tiendas (algo positivo para la organización, puesto que a un mayor número de stands, mejores ingresos de patrocinio).

Las mesas redondas cada vez escasean más, aunque con invitados como Lazaro Muñoz, Miguel Angel Sanchez -que se apuntan a un bombardeo, todo sea dicho- se hacen lo suficientemente amenas como para no perderselas. Las proyecciones son buenas, vamos, con lo último que se puede encontrar uno en la burra, pero en pantalla de cine y con olor a zapatilla, pero mola. Los concursos? Bueno,... puede que este año sea uno de los puntos negros, dado que se suponía uno de los platos fuertes de esta edición, y por su escasa participación, finalmente se cancelo. Os explico, el premio era un viaje a Japón para dos personas, y aunque era para dos personas tan solo financiaban el de una, es decir, que hay que pagarse el viaje de la segunda persona (pero vamos, un viaje a mitad de precio!). Puede que haya sido ese el problema -o la complicación en su planteamiento-, por el que no se apuntaran ni diez personas (algo que imposibilitaba su celebración).

Otro punto flojo que he notado -para nada responsabilidad de los organizadores- es el escaso número de fanzines. Uno, que se ha criado en ese mundillo, en ocasiones echa de menos aquellos tebeos casposos, o esos artículos de crítica corrosiva, y se tiene que conformar con su versión informática, que son estos blogs (como el de un servidor de ustedes).

No os voy a engañar, si me paso todos los años es para ver a la gente, charlar un rato con los amiguetes, Kalisto, Petrus (este año no te he visto), y si viene alguien de fuera como ha sido este año, pues mejor (Mario, Jaime, Rafa, Eva, Los munuera, Lazaro, Isabel, Mike y familia y todo los que me estaré olvidando). Por cierto, lo que no se me va a olvidar en la vida será aquella partida a las cartas de Pokemon con el hijo de Mike. Todavía tengo pesadillas!